Ayudar a los usuarios finales a solucionar problemas técnicos o aprender a utilizar mejor los cereales secundarios y los coproductos de EE. UU. es una parte del trabajo del Consejo de Cereales de EE.UU. (USGC) en todo el mundo.
México es el mayor comprador de maíz de EE.UU., consumiendo casi un tercio de las exportaciones en la campaña comercial 2019/2020 con casi 14,5 millones de toneladas métricas (570 millones de bushels). A medida que esta industria ha ido creciendo, el Consejo ha seguido proporcionando información de mercado y asistencia técnica personalizada. Este papel como asesor confiable ha cobrado relevancia a medida que los grandes productores de carne cambiaron su enfoque hacia la optimización de los costos de alimentación.
En México, el Consejo ayudó recientemente a encontrar una respuesta a por qué uno de los productores de bovinos de carne más grandes de América Latina estaba viendo resultados inconsistentes en las pruebas de maíz en copos de vapor y, en el proceso, ayudó a mantener las ventas a este importante cliente.
“Después de que administramos con éxito un programa en el verano de 2020 que examinaba la gestión de la calidad del maíz en las fábricas de alimentos de la compañía, nos pidieron que abordemos otros problemas en sus operaciones de molienda relacionados con el análisis de almidón”, dijo Heidi Bringenberg, subdirectora de USGC en México. “Gracias al trabajo técnico realizado con la empresa, continuaron comprando maíz estadounidense durante una temporada de importación difícil”.
El almidón es importante en las operaciones de laminado al vapor ya que afecta la utilización de nutrientes. Tanto el vapor como el enrollado del grano de maíz permiten un acceso más fácil al almidón, haciéndolo más digerible tanto en rumiantes como en animales monogástricos e impactando el valor alimenticio del maíz y de la ración completa. Un importante productor mexicano de bovinos de carne estaba preocupado por la variada densidad de las escamas dentro de un solo molino y tambien visible en los corrales de engorda, lo que generó preocupaciones sobre la efectividad de la maquinaria y el manejo.
Se consultó con un nutriólogo de bovinos para trabajar directamente con el equipo técnico de la empresa el tema. Analizó sus datos para determinar por qué se estaban produciendo picos con el porcentaje de disponibilidad de almidón.
La medida estándar para la disponibilidad de almidón es el peso de un bushel, o el volumen de un bushel de peso para una muestra determinada de maíz en copos. La medición proporciona una forma de evaluar la calidad de las hojuelas al estimar la disponibilidad de almidón del maíz en hojuelas al vapor. La densidad del peso del bushel está influenciada por varios factores, incluido el tipo y dimensión del equipo de descascarillado, el tipo y variedad de grano, el contenido de humedad, desgaste de los rodillos y los procedimientos de descascarillado con vapor.
El consultor técnico del Consejo rastreó las diferencias en las muestras de la compañía a esta medición inconsistente, generadas por fluctuaciones en la temperatura o el tiempo durante el secado desde el momento en que se tomaron las muestras en la fábrica o corral de engorde y cuando las muestras se analizaron en el laboratorio. Como resultado, algo de almidón en el maíz en copos de vapor tuvo una reacción adversa: retrogradación o reasociación con moléculas de almidón que se han separado durante la gelatinización cuando la temperatura aumenta después de que el maíz deja los rollos en la máquina.
El Consejo devolvió estos resultados a la empresa, que ahora está implementando medidas para obtener muestras y pruebas más precisas del maíz. Ahora existen nuevos protocolos para ayudar a proporcionar un análisis más coherente, incluida la medición de la densidad de bushel en el corral de engorde; esparcir las muestras y dejar que se enfríe antes del envasado; y secar las muestras constantemente antes de realizar la prueba.
“Brindar educación técnica es clave para aumentar la demanda en México”, dijo Bringenberg. “Continuaremos trabajando con el sector de la carne bovina para solucionar problemas y transmitir de manera más amplia las ventajas económicas y nutricionales de los cereales y coproductos estadounidenses.
